Una noche por demás perfecta, un ensamble lleno de músicos grandiosos, un público entregado y en comunión con lo que ocurría en el escenario; ambiente ideal y en un espacio que motivaba a disfrutar las notas musicales salidas del templete. Noche de apoyo a una causa social, noche de presentación en vivo de los últimos trabajos en solitario de Alonso Arreola: "Las transfusiones de Cruento" y "Los contagios de Cruento".

El show fue por demás maravilloso, con una respuesta increíble de parte del público, que desde temprana hora hizo largas filas para accesar al recinto. El Auditorio X fue el lugar ideal para deleitarse con la música de un extraordinario ensamble de músicos que acompañaban a Alonso: Alex Otaola, Daniel Zlotnik, Chema Arreola, Fernando Rivera Calderón, Gerardo Rosado, Alfonso André, Sabo Romo y Lo Blondo.


Desde el momento que las luces se apagaron para dar paso al espectáculo musical se sentía la energía del público presente. Alonso Arreola siempre se mantuvo en comunicación constante con los asistentes, llegando incluso, a bromear un tanto con ellos. "Es una noche extraordinaria y como tal tocaremos de manera cronológica canciones de mi trabajo como bajista" mencionó en su primera dirigencia al público.

Es difícil mencionar los títulos del setlit, no tanto por hacer una lista, sencillamente porque la música de Arreola es mucho más profunda y sentimental que un simple nombre. La ejecución del ensamble fue simplemente extraordinaria, con momentos donde incluso llegaron a hacer un jamming de jazz inolvidable. Algunos otros momentos quedarán grabados por romper la pared con el público e invitarlo, por medio de patitos de hule, a unirse a la realización de una canción en vivo.


Si nos rodeamos del trabajo musical, el que nos narra la historia de Cruento, encontraremos dos Ep's llenos de experimentación sonora, bien llevados y excelentemente logrados. Cruento esta entre la música y su historia puede ser tan cercana (o lejana) dependiendo la inmersión que hagamos de manera auditiva. Un experimento que en la práctica resulta convincente y enriquecedor; cosas como estas nuestros oídos lo agradecen.