TXT: Angélica Ferrer Campos
Fotos: Cristian Méndez
La
juventud de las hermanas Beaujean se plasma en el escenario del festival
primavera Jazz 2012, el cual se realiza desde el año pasado en la Fundación
Sebastián. Entre guiños, mohines, sonrisas, movimientos que marcan el ritmo y
los compases a seguir en las canciones, la agrupación integrada por Nicolás
Santella, Gabriel Puentes e Israel Cupich, logra cautivar al público presente.
La
presentación es una mezcla de sentimientos que van desde el cariño hasta la
tristeza, la soledad y el dolor; esto se va desenvolviendo y se diluye
lentamente durante una hora llena de emoción. Prueba de ello fueron las
composiciones Apariciones e Ideas 1, siendo ésta última una de las
más reiterativas acerca del luchar día a día por el amor con oraciones como “tu
y yo iremos sin fallar, sin hablar, sin suspirar, sin tropezar. Mírame, aquí
estoy amándote, amándote…”.
Invisible es
la siguiente canción y es dedicada por Ingrid Beaujean a su pareja, esto
provoca expresiones de ternura entre los asistentes y otorga mayor alegría a la
melodía, la cual explica de qué manera el destino va creando situaciones
novedosas y a las que es mejor recibirlas de forma positiva y sin miedo. Esto
cambia con la pieza subsecuente, que a pesar de estar escrita y cantada en
inglés, logra trasmitir la necesidad de tener cerca a la persona amada.
El
tenor de la presentación cambia con Estrella
de Mar, ya que su temática es distinta: habla acerca de cómo una niña debe
soportar la incertidumbre y el dolor causado porque su padre se va a trabajar
“al otro lado”; poco a poco, pierde la esperanza y “no puede ya vivir sin él”.
Es una de las canciones que más conmueve a los espectadores, que llenaron la
sala destinada para este evento.
Pero
todo lo bueno tiende a finalizar en algún momento y la presentación concluye
con Mi día (ya será para la otra),
que es entonada por la mayoría del público de forma melancólica pero decisiva a
iniciar una nueva vida sin una pareja, en la que por no tener su propio
espacio, las cosas se tornaron para mal. Después de un magnífico recital, todos
aplauden y se ponen de pie ante Jenny e Ingrid y su Project.