"Este pesa como 80 kilos es como si estuvieras cargando a un señor. A veces hasta se te marcan las llagas en el hombro del mismo peso, se te muele la sangre- hace referencia al cilindro y a las lesiones que puede sufrir su cuerpo al momento de transportar el organillo- ni es tan fácil tampoco tocar, muchas veces la gente cree: "yo le toco", lo tocan a lo mucho como 30 segundos y ya les duele el brazo, porque hasta eso tienes que llevar un ritmo, debes poner las pausas, no debes dejar de tocar porque se les va el aire y suena re feo.” Jorge hace alude a su trabajo de fines de semana

La medica, profesora e investigadora de la facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México Laura Moreno Altamira, explica los factores de riesgo para los organilleros en su jornada laboral los cuales los divide en: físicos, químicos, ergonómico, biológicos y psicosociales.

Con los problemas físicos se refiere al contacto y espacio en el que laboran los organilleros, porque al hacerlo en la calle están expuestos a la radiación ultravioleta del sol y al ruido ambiental (ruido de los vehículos).

En cuanto a los químicos están en contacto con el polvo, humo, específicamente a los gases desprendidos por los vehículos, el más dañino para el ser humano como lo es el monóxido de carbono.

Estos problemas se ven reflejados en: el desarrollo de cáncer de piel, trastornos de sueño, efectos gastrointestinales, hipertensión, dolores de cabeza esto producido por las alteraciones del ruido, ambiental y también por los decibeles emitidos por el organillo.

El factor de riesgo ergonómico es estar de pie largas horas sin tener un descanso o movimiento por lo cual se verá con complicaciones de varices. Otro problema es una sobrecarga física localizada en la espalda pues al no tener una carga equilibrada se pueden dislocar los discos de la columna o la desviación de la misma.

También se ve afectado el hombro del músico que suele transportar el instrumento de trabajo y con esta acción se desarrollan dos tipos de traumas: musculo, referente al contacto esquelético y columna donde los miembros superiores toracitos se dislocan o el peso de la misma persona más el del instrumento pueden afectar en cierto tiempo las rodillas.

Los problemas dermatológicos afecta su piel causada por la compresión de la cinta de cuero que ayuda a montar el cilindro sobre la espalda.

En los factores químicos las principales consecuencias son: irritación de las vías respiratorias, conjuntivas (irritación de los ojos), una falta de oxigeno que tiempo podría producirse un infarto.

Los problemas biológicos como toda persona que trabaja en la calle es por comer en la vía publica por lo que aumenta el daño al manipular el dinero, sin tener medidas de higiene.

Haciendo alusión en los problemas psicosociales se ven con más claridad. La falta de seguridad social, inseguridad en el empleo debido a que es un trabajo informal aunque en cierta medida están reconocidos por el gobierno, eventos catastróficos como sufrir agresiones automovilísticas o accidentes que pueden producir su muerte.

Existe otra clasificación de factores de riesgo que por lo regular no se suele prestar mucha atención estos se llaman: mecánico – dinámico – estático, sin embargo todos lo sufrimos, esto es un pavimento deteriorado (hoyos, baches y degradación del mismo), con lo que se podría sufrir una desguince en el pie o alguna fractura. Por lo que la especialista sugiere que los organillos se transporten con rueditas para evitar ciertos riesgos en la salud.

Ha perdurado esta tradición desde hace varias décadas por todos los medios en los que ha logrado incursionar: cine, telenovelas y últimamente los cortometrajes, se ha promovido esta tradición resaltándolos como protagonistas. ¿Pero qué pasa en las calles cuándo no los ven con la misma atención? La gente se sabe las canciones y uno que otro se siente Pedro Infante cuando tocan Amorcito Corazón pero no destina una moneda para los músicos y a veces hasta los miran con indiferencia o con desprecio cuando ellos se acercan.

Antes solicitaban su presencia en fiestas o eventos privados para tocas las Mañanitas o Amor eterno cuando era un suceso de despedida pero la tecnología ha tenido presencia en la desaparición de los organilleros.

Reproductores de música portátil obstruyen que las notas musicales de él cilindro lleguen a sus oídos, es más fácil cargar un reproductor que 50 kilos de madera sobre la espalda ó simplemente mantener el iPod en el bolsillo y no sobre el hombro dejando llagas y marcas de dolor por el rose de la correa con la piel. La problemática es evidente para los organilleros cuando sólo se escucha su música entre pasos de las calles de la ciudad.

Ante está situación hay programas y algunos museos se han dado a la tarea de recordar la importancia de su presencia entre las calles. En el Museo de Arte Popular se encuentra montada una exposición donde se reconocen los oficios y trabajo tradiciones del país que se han venido perdido o que se logran ver con menos frecuencia. Un espacio breve se destina para el organillo y su trabajador.

El organillero realiza gran esfuerzo por tocar cada mañana, cada día, en las calles de ésta ciudad.